La mujer fue el segundo fallo de Dios. La mujer es, por su esencia, serpiente, Eva esto lo sabe todo sacerdote; de la mujer viene todo infortunio al mundo esto lo sabe asimismo todo sacerdote. Por consiguiente, también la ciencia viene de ella
Friedrich NietzscheLa mujer fue el segundo fallo de Dios. La mujer es, por su esencia, serpiente, Eva esto lo sabe todo sacerdote; de la mujer viene todo infortunio al mundo esto lo sabe asimismo todo sacerdote. Por consiguiente, también la ciencia viene de ella
La mujer fue el segundo fallo de Dios. La mujer es, por su esencia, serpiente, Eva esto lo sabe todo sacerdote; de la mujer viene todo infortunio al mundo esto lo sabe asimismo todo sacerdote. Por consiguiente, también la ciencia viene de ella
La mujer fue el segundo fallo de Dios. La mujer es, por su esencia, serpiente, Eva esto lo sabe todo sacerdote; de la mujer viene todo infortunio al mundo esto lo sabe asimismo todo sacerdote. Por consiguiente, también la ciencia viene de ella