El odio y el desprecio se excluyen mutuamente. En no pocos casos el odio a una persona tiene sus raíces únicamente en la estimación involuntaria de sus virtudes
Arthur SchopenhauerEl odio y el desprecio se excluyen mutuamente. En no pocos casos el odio a una persona tiene sus raíces únicamente en la estimación involuntaria de sus virtudes
El odio y el desprecio se excluyen mutuamente. En no pocos casos el odio a una persona tiene sus raíces únicamente en la estimación involuntaria de sus virtudes
El odio y el desprecio se excluyen mutuamente. En no pocos casos el odio a una persona tiene sus raíces únicamente en la estimación involuntaria de sus virtudes