Hasta la guerra, la vida nunca fue para mí más real que una serie de sombras chinescas vistas en una pantalla. Y yo prefería que fuese así. No me gusta que los contornos de las cosas sean demasiado nítidos. Me gusta todo suavemente vago, un poco borroso
Margaret MitchellHasta la guerra, la vida nunca fue para mí más real que una serie de sombras chinescas vistas en una pantalla. Y yo prefería que fuese así. No me gusta que los contornos de las cosas sean demasiado nítidos. Me gusta todo suavemente vago, un poco borroso
Hasta la guerra, la vida nunca fue para mí más real que una serie de sombras chinescas vistas en una pantalla. Y yo prefería que fuese así. No me gusta que los contornos de las cosas sean demasiado nítidos. Me gusta todo suavemente vago, un poco borroso
Hasta la guerra, la vida nunca fue para mí más real que una serie de sombras chinescas vistas en una pantalla. Y yo prefería que fuese así. No me gusta que los contornos de las cosas sean demasiado nítidos. Me gusta todo suavemente vago, un poco borroso