La capacidad de estar solo es la capacidad de amar. Puede que te parezca paradójico, pero no lo es. Es una verdad existencial; sólo aquellas personas que son capaces de estar solas son capaces de amar, de compartir, de llegar a lo más profundo de la otra persona; sin poseer a la otra persona, sin depender de ella, sin reducirla a una cosa, y sin volverse adictos a ella