En la casa de mi madre todo invitaba al amor. Era un paraíso del amor. Amor se respiraba y amor se bebía; la belleza de las dos mujeres, sus amantes, los perfumes, los cantos, la música, los bailes..., y hasta la grotesca y dramática huida de los invitados me parecía voluptuosa y apasionada.

Panait Istrati
En la casa de mi madre todo invitaba al amor. Era un paraíso del amor. Amor se respiraba y amor se bebía; la belleza de las dos mujeres, sus amantes, los perfumes, los cantos, la música, los bailes..., y hasta la grotesca y dramática huida de los invitados me parecía voluptuosa y apasionada.
Panait Istrati
En la casa de mi madre todo invitaba al amor. Era un paraíso del amor. Amor se respiraba y amor se bebía; la belleza de las dos mujeres, sus amantes, los perfumes, los cantos, la música, los bailes..., y hasta la grotesca y dramática huida de los invitados me parecía voluptuosa y apasionada.
Panait Istrati
En la casa de mi madre todo invitaba al amor. Era un paraíso del amor. Amor se respiraba y amor se bebía; la belleza de las dos mujeres, sus amantes, los perfumes, los cantos, la música, los bailes..., y hasta la grotesca y dramática huida de los invitados me parecía voluptuosa y apasionada.
Panait Istrati

Más Frases de Amor