El músico es quizás el más modesto de los animales, pero también el más orgulloso, pues es el que inventó el sublime arte de arruinar la poesía
Erik SatieEl músico es quizás el más modesto de los animales, pero también el más orgulloso, pues es el que inventó el sublime arte de arruinar la poesía

El músico es quizás el más modesto de los animales, pero también el más orgulloso, pues es el que inventó el sublime arte de arruinar la poesía

El músico es quizás el más modesto de los animales, pero también el más orgulloso, pues es el que inventó el sublime arte de arruinar la poesía
